En la localidad hay quienes han entregado gran parte de su vida al deporte y en lo que respecta al basquetbol sale a relucir el nombre de José Everardo Yáñez Tapia, quien en los últimos años ha destacado como entrenador y promotor del deporte ráfaga.
Desde muy pequeño, Everardo sintió atracción por el baloncesto, teniendo sus inicios en la primaria donde cursaba, pero es en la Secundaria Técnica 47 cuando se metió de lleno desarrollando al máximo sus habilidades.
“En la escuela no había equipo de basquetbol pues la mayoría jugaba futbol, pero en una competencia el maestro de educación física formó uno para participar en la semana deportiva y otros torneos de la ciudad”, recordó Yáñez.
De allí en adelante formó parte de otras quintetas, como es el caso del CBTIS 234 y Universidad Valle del Bravo, con el cual obtuvo varios logros.
Después de casarse y formar su familia decidió hacer una pausa como jugador, para probar suerte como entrenador, tomando las riendas del equipo de la primaria Lauro Aguirre, participando en diversas competencias.
Posteriormente, ya con algo de experiencia, tomó la batuta de los Tigres del CBTIS 234, haciendo un gran papel en el torneo de desarrollo, así como en la Liga Municipal de Basquetbol, Semana Deportiva y torneos regionales del InterCBTIS.
Dado a su gran amor a esta disciplina decide promover el baloncesto, pero al poniente de la ciudad y es por eso que en el 2017 comienza a entrenar a jovencitos de aquel sector de la ciudad, ayudándoles a desarrollar las habilidades para su desempeño en la duela.
“La verdad hay mucho talento que no ha sido descubierto ni pulido aquí al poniente de la ciudad, es por eso que le apostamos y estamos trabajando en beneficio de chicos y grandes que les guste y quieran aprender el basquetbol”, finalizó Yáñez.
Yáñez ha sido clave en la preparación y formación de los equipos de Carmen U. de Rendón, Miguel F. Martínez, Miguel Hidalgo, Aquiles Serdán y Juan B Tijerina.