La nueva colada de lava en el volcán La Palma ha terminado por destruir las pocas casas y negocios que todavía quedaban en pie en el norte de Todoque.
Según información dada este domingo por el Instituto Volcanológico de Canarias, con temperaturas de hasta 1.240 grados centígrados, la lava ha destruido las pocas edificaciones.
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Además, el Cabildo de La Palma ha estado informando que no se han presentado incidentes este domingo, a pesar de que en la noche pasada el volcán se volvió más ruidoso y ha habido muchas vibraciones.
El Cabildo palmero afirma que la evolución de la erupción se ha mantenido dentro del proceso normal de un volcán, además, los científicos han subrayado que siguen monitorizando la actividad con el fin de garantizar la seguridad de las personas.
Se añade que se ha estado permitiendo la entrada a los vecinos evacuados con propiedades que se encuentran fuera de la zona de seguridad con el fin de que puedan recoger ropa y enseres.
El acceso a dichas viviendas se encuentra controlado y además contarán con el acompañamiento de personal de seguridad.
Se informa que dicha medida puede estar sujeta a varios cambios según vaya evolucionando las condiciones meteorológicas y la evolución del proceso eruptivo.
Según el sistema europeo Copernicus, hasta este domingo, las coladas de lava se han extendido más de 497 hectáreas y han logrado destruir más de 1,186 edificaciones.
Miguel Ángel Morcuende quien es el director técnico del Plan de Emergencia Volcánica de Canarias, ha agradecido en una rueda de prensa el civismo de los habitantes del Valle de Aridane, el cual se encuentra muy cerca del volcán, estando sometidos diariamente a ruidos y explosiones.
Ayer fue una noche dura para los vecinos de Aridane, pues un nuevo fenómeno eruptivo explosivo ha provocado ruidos e incomodidad permanente.
La nueva colada del Volcán en La Palma ha terminado de destruir las pocas casas y negocios en pie.