Unas vacaciones familiares en Orlando, Florida, Estados Unidos, estuvieron a punto de convertirse en una tragedia cuando Mark Gibbon, empresario británico de 62 años, fue acusado de intentar asesinar a su nuera, Jasmine Wyld, de 33 años, sumergiéndola por la fuerza en una piscina del complejo habitacional donde se hospedaban, a pocos kilómetros de Disney World.
De acuerdo con el reporte policial, los hechos ocurrieron durante el verano, cuando la familia disfrutaba de un día de descanso en las instalaciones del alojamiento. Sin previo aviso, Gibbon habría sujetado a su nuera por los brazos y el cuello para después sumergir su cabeza bajo el agua, manteniéndola así mientras ella luchaba por respirar.
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En medio de la desesperación, la hija de la víctima y nieta del agresor, una niña de apenas 9 años, intervino valientemente. La menor se abalanzó contra su abuelo para liberarla, logrando que soltara a su madre y así poner fin al ataque. Testigos alertaron de inmediato al personal del lugar y a la policía local.
Las autoridades de Orlando detuvieron a Gibbon en el lugar y lo trasladaron a una prisión del condado de Orange. Será procesado por intento de homicidio en primer grado, entre otros posibles cargos. La víctima fue atendida por paramédicos, quienes confirmaron que no sufrió lesiones graves, aunque sí un fuerte impacto emocional.
Según la investigación, Jasmine Wyld y Mark Gibbon mantenían una relación sentimental secreta que comenzó hace un par de años. Ambos decidieron iniciar este noviazgo tras haber pasado por matrimonios fallidos. Mark Gibbon se había separado de la madre de Jasmine, mientras que ella se divorció del hijo de Mark, Alex Gibbon.
Mark vivía solo en una casa valorada en casi un millón de dólares después de su divorcio. Por su parte, Jasmine también se había separado de Alex, con quien tiene dos hijos. La relación entre Mark y su hijo Alex es tensa y distante; de hecho, llevan años sin hablarse después de que Alex intentara atropellar a su padre con un automóvil.