Para adquirir la cédula profesional es necesario contar con una serie de documentos, y uno de estos puede ser ‘complicado’ de obtener; asegúrate que cuentas con él previo a hacer el procedimiento ante la Secretaría de Educación Pública (SEP). También te puede interesar: ¿qué pasa si trabajas sin cédula profesional?
Actualmente, el proceso de la cédula profesional se hace a través del portal web del gobierno, ya que es un trámite exclusivamente en línea. Cabe destacar que esta facilidad únicamente aplica para grados escolares obtenidos de 2018 en adelante.
Los requisitos pedidos por la SEP son bastante accesibles, aunque uno genera ‘problema’, pues es necesario ir a las oficinas de otra dependencia: el Servicio de Administración Tributaria (SAT). La cédula profesional exige presentar la e.firma.
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¿Cómo obtener la e.firma del SAT?
La firma electrónica del SAT exclusivamente se adquiere de manera presencial, aunque su renovación es posible en lo digital. Para la e.firma debes acudir a las oficinas ubicadas a lo largo del país. Para agilizar, se recomienda pedir una cita.
Los ciudadanos deben estar previamente registrados en dicha dependencia a través del Registro Federal de Contribuyentes (RFC). A la fecha asignada, lo pedido por el SAT es lo siguiente:
- Solicitud de certificado de e.firma y comprobante de cita, si es el caso.
- Un correo electrónico vigente.
- Identificación oficial.
- Memoria USB, no importa el almacenamiento ni que sea nueva, pues únicamente se ocupará para dejar los archivos que componen la e.firma.
Volviendo a la cédula profesional, además de la e.firma del SAT debes tener a la mano la Clave Única de Registro de Población (CURP). Una vez ingresados los datos, de manera automática, te dirán cuál grado quieres registrar. Existen dos métodos de pago: a través de un tarjeta de crédito o débito y mediante el pago referenciado para llevarlo a cabo en ventanillas de un banco.