Juany y su esposo perdieron todo su patrimonio y el de sus dos hijos, al registrarse ayer un incendio por un cortocircuito en el minisplit. Hoy, pide ayuda a la ciudadanía porque: “Hay que empezar de nuevo”.
Ayer en la mañana, Juana María Rea, de 27 años, salió de su casa en privada 5 de Febrero 5702 junto con su padre, un hombre enfermo del corazón y diabetes, a la tienda, también la acompañaban sus hijos.
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Al paso de cinco minutos, la mujer se contactó con su esposo, quien había salido hacía con su madre, para que fuera él quien comprara las cosas que faltaban de la tienda. Al regresar, encontró su casa convertida en un “infierno”.
La parte alta donde ella duerme se incendiaba, sus vecinos trataron de ayudar, pero poco pudieron hacer -al contrario, uno de ellos se vio afectado por el fuego en la parte de la cocina-.
Debido a la radiación, el cuarto de abajo, donde su padre duerme, también comenzó a arder.
Para ese tiempo, ya alguien había dado aviso a los Bomberos, quienes llegaron a los pocos minutos para contener y extinguir las enormes llamaradas.
Al final todo se consumió en las dos plantas. Muebles, enseres, documentos importantes, ropa, incluso medicamento costoso, todo.
Los elementos después de un buen rato lograron controlar la situación; confirmando lo que ella ya sabía, todo se había perdido, pero al menos ella y su familia estaban sanos.
Solicita ayuda de la ciudadanía
Entrevistada ya por la tarde, la mujer solicitó ayuda a la comunidad neolaredense y mencionó que el incendio fue a causa de un cortocircuito en el minisplit.
Como cualquier madre que protege a los suyos, Juany pidió ropa principalmente para sus hijos de dos y siete años. De lo demás, dijo, agradecería lo que estuviera en las manos de la gente.