Acompañado de su perro fiel murió un indigente que ya no vio la luz del día, cuando dormía en una de las banquetas de la firma Famsa, ubicada en el sector centro de la ciudad; se presume que el frío y una congestión alcohólica le quitaron la vida ya que era adicto a las bebidas embriagantes como el mezcal y “huachicol”. El deceso se reportó a las 8:10 de la mañana de ayer en la banqueta del negocio mencionado, tratándose de un hombre de aproximadamente 40 años a quienes sus amigos de la calle lo conocían con el nombre de Javier, al parecer originario del vecino estado de Nuevo León.
NO QUISO IR AL ALBERGUE
El cuerpo del infortunado estaba envuelto en unas cobijas y colchonetas que recién le había entregado el personal de la Dirección de Protección Civil y Bomberos (DPCB), informando que días atrás a él y otros en su misma condición se les proporcionó café caliente y pan, invitándolos a ser llevados al albergue, de acuerdo a Joel Silva Pulido, subdirector de la citada dependencia.
ERA ACOMODADOR
Otros que también dormían en la banqueta del edificio de Famsa, informaron que su amigo trabajaba de acomodador de carros o limpiavidrios en las afueras de la tienda de conveniencia ubicada en el crucero de Guerrero y Guatemala. No era alguien problemático, convivía con ellos, afirmando que consumía mezcal y otras bebidas alcohólicas, por lo que se presume que su muerte se debió a tal ingesta, junto con el frío imperante de madrugada en la ciudad. Al respecto, Silva Pulido dijo que en fechas recientes, personal de la corporación ha recorrido las principales calles de la ciudad para recoger a los indigentes y llevarlos a los albergues, pero muchos de estos se han negado a ello y se quedan en la vía pública, exponiéndose a las bajas temperaturas, como ocurrió con Javier.