La presa La Amistad, principal fuente de abastecimiento de Nuevo Laredo, se ha beneficiado con diversas jornadas de lluvias en la región de Acuña, Coahuila, hasta alcanzar el 21 por ciento -luego de que permaneciera por meses en 19 por ciento- lo que garantiza el agua para el resto del año, principalmente para el consumo humano de ambos países -que es la prioridad-, así como la ganadería, la parte industrial y de servicios.
“Lo importante es la presa La Amistad, que está bien, en niveles bajos, no críticos como a principios de año, que llegó a estar bajo en verano y ahorita anda arriba de los 20”, dijo Gustavo Pantoja Villarreal, presidente del Centro de Estudios del Río Bravo (Cier).
Mencionó que en el actual 2024, en comparación con el 2022 y el 2023, las condiciones son mejores y aunque no es lo ideal, los puntos que incrementó en los últimos meses, en el segundo semestre del 2024, son satisfactorios. Pantoja Villarreal comentó que desde hace 10 años no se registraban lluvias como las que cayeron en agosto y septiembre; en lo que va del año, hay un aumento de 20 por ciento en comparación del mismo periodo del año anterior.
“En los primeros días de septiembre cayeron en la zona urbana de la ciudad casi 10.5 centímetros de agua, es mucha agua en menos de 24 horas”, refirió.
El presidente de Cier afirmó que el beneficio también se presentó aguas arriba de Nuevo Laredo, no solamente en La Amistad, sino en las presas de la comunidad regional de la zona noreste.