Rivas es visto dentro del PAN como el culpable de todas las angustias y todos los quebrantos -como dice la canción-, tan es así que de un tiempo para acá en las conferencias lo sientan al extremo, ya no en un lugar preponderante, de hecho en última conferencia en la que habló Yahleel, hasta hicieron que se levantara de donde se había sentado para moverlo hasta la última silla, donde ya ni mesa alcanzaba, lo que representa el más claro de los mensajes, que es el “apestado”.
Aun así, le dieron la palabra por un momento, todo para que dijera puras incoherencias, pues es el que menos puede hablar de impugnar o pelear los resultados, pues la diferencia con su contrincante es mayúscula, está “perdidísimo”, aseguró incluso que con él se habían enfocado más para hacerlo perder, cuando lo que se perdió desde hace mucho, es la confianza de los ciudadanos en él, si es que alguna vez la hubo.
Como le invirtieron demasiado dinero -del pueblo-, perder la elección les dolió demasiado, tanto que harán hasta lo imposible para impugnar el proceso, cuando debieron hacer lo mismo que Cristabell: aceptar que la voluntad que el pueblo manifestó y desear lo mejor a la siguiente administración, eso es lo más ético y que al final habla bien de los políticos.
Entendiendo lo anterior, es momento de cuidar la democracia, de hacer que se respete la voluntad de los neolaredenses...
Además del dinero que gastaron -que podría fiscalizarse por exceso de tope de campaña- para los panistas hay otro temor, que la siguiente administración saque todos los trapitos y terminen por meter al bote a varios por los desfalcos a manos llenas que han hecho estos cinco años, de hecho ahí estaría involucrado también García Cabeza de Vaca, pues es bien sabido que los alcaldes panistas además de agarrar su mochada del erario, tenían que reportarse con su patrón.
Las implicaciones de la mayoría morenista en el Congreso del Estado tiene, pero bien preocupado a García Cabeza de Vaca, pues según dicen, como ya no controlaría esa legislatura, si no es reemplazado antes de que acabe la actual con alguien a modo, la que viene pondría a alguien que no colaboraría con sus planes, por eso se habla de que pondrá a alguien de confianza y de ahí posiblemente intente darse a la fuga.