RÍO REVUELTO

Sin lugar para bromas

Escrito en OPINIÓN el

El horno no está para bollos con el tema de las armas en Estados Unidos, especialmente en Texas, por la política de posesión de armas que facilitó al tirador de Uvalde, el acceso a la AR-15 y gran cantidad de municiones que utilizó en la masacre de la escuela.
Prueba de lo tenso que está el ambiente, es que en Laredo un sujeto fue arrestado presuntamente por hacer el comentario a quien le vendió una mira para el arma, de que pretendía hacer una “cacería humana” con ese aditamento, pues si acaso fue una broma de mal gusto hacer ese comentario, ocurre en un muy mal momento en que todo indicio de amenaza de esta índole es tomada con mucha seriedad.
El hombre arrestado no hizo amenaza alguna a maestros ni alumnos sobre algún tiroteo; sin embargo, ese comentario a un tercero, fue suficiente para que le cayera toda la fuerza policiaca con una redada, pues para colmo tenía su arsenal en un hogar frente a una escuela.
A decir verdad, lo que para muchos residentes de otros países sería un arsenal, por la cantidad de armas y municiones que tenía en su posesión el hombre del que hablamos, en Texas es relativamente promedio, lo que no es precisamente algo positivo, especialmente en estos tiempos.
Si bien el argumento se inclina usualmente al tema de la autoprotección, tal vez sería remotamente justificable si tuviera un arma corta y algunas balas, pero en este y otros casos el arsenal que llegan a acumular muchos de los aficionados a las armas, es más para un conflicto bélico, como una invasión que nunca ha ocurrido, que para cuidar sus hogares de intrusos muy malintencionados.
Más allá de criticar la cultura armamentista o juzgar si está bien o mal armarse en tales proporciones, el punto medular del clamor de los padres y familiares de los niños y maestras asesinadas en este histórico tiroteo escolar, es el fácil acceso que tuvo un adolescente de 18 años a la AR-15 con la que frustró las vidas que apenas comenzaban.
Hoy todo Estados Unidos ha debatido el tema entre sus bandos que están a favor y aquellos que se oponen, mientras que el resto del mundo ha visto con ojos críticos esta situación y la actitud que ha tomado un segmento del gobierno ante el reclamo generalizado de actuar al respecto.
Regresando al tema de que el horno no está para bollos, las “bromas” de estudiantes laredenses de replicar los eventos de Uvalde, fueron tomadas con muy poco humor, ante el temor de que ese triste escenario se repita.