RÍO REVUELTO

Una crisis para reflexionar

Escrito en OPINIÓN el

La crisis del agua está en boca de todos; para algunos que no la padecen aún lo toman a broma; otros más toman la determinación de recolectar el vital líquido para enviarlo a Nuevo León y otros más de forma más neutral; sin embargo todos sin excepción deberíamos comprender la magnitud del problema y sobre todo el hecho de que no estamos exentos de consecuencias de esta naturaleza en el futuro.
De alguna manera, cada neolaredense puede y debe poner su granito de arena al tomar las mínimas medidas del cuidado de agua, desde evitar lavar los autos a manguerazos, lavarse los dientes con un vaso de agua y no dejando la llave correr, entre otras tantas medidas que ya conocemos, pero también cada Ayuntamiento debe hacer lo propio con la infraestructura del manejo del agua, pues según las estadísticas, más que el consumo doméstico, son otros factores los que han derivado en la escasez del vital líquido.
Según estudios del Colegio de la Frontera Norte, antes de irse de Nuevo Laredo la administración Rivas, el diagnóstico arrojaba que Comapa desperdiciaba en fugas y en general sus problemas de infraestructura, hasta el 40 por ciento del agua, obviamente esa política de no invertirle a colectores no solo prevaleció durante los cinco años de ERC, sino que es gran parte de lo que define sus dos periodos en la alcaldía.
Si alguien llega a recordar esos tiempos de Rivas, sin duda lo primero que vendrá a la mente serán los baches por doquier, pero sobre todo los socavones, que según los ingenieros, no se trata sólo de la ausencia en inversión o substitución de los viejos colectores, sino el llamado estrés hídrico y otras negligencias que en conjunto favorecían el colapso de las calles de Nuevo Laredo.
La actual administración ha tenido que entrarle a realizar un sinfín de reparaciones, ante el enorme descuido en que dejó Rivas a la ciudad, entre esas obras actuales están obviamente las sustituciones de colectores y acciones en ese tenor.