EN UN LUGAR DE LA CANCHA

Santi a Europa

Los únicos cuatro técnicos mexicanos en la Liga MX están en lo más alto de la tabla: Vucetich, con Rayados; El Piojo, con Tigres; Nacho Ambriz, con Toluca, y Jimmy Lozano, (¿sucesor de Ambriz como técnico nacional?) con una nómina mucho menor, tiene al Necaxa en el nada despreciable cuarto sitio.

Escrito en OPINIÓN el

Santiago Giménez, nuestra única exportación este verano, tomó una gran decisión al irse a Europa en este momento, sobre todo a la liga a la que se va, la cuna del futbol total, que es muy formativa y pule a los jugadores jóvenes.
Hay quienes dicen que está arriesgando ir al Mundial o ser titular en el mismo si no se adapta rápido, pero Mundiales puede ir a varios más; oportunidades para ir a Europa podrían no ser tantas si de repente tiene un bache prolongado. Allí vemos a Sebastián Córdova, que por fortuna para él, primero, después para Tigres y en un futuro mediano para la Selección, ya empieza a levantarse. En 2026, él y Lainez deben traer la batuta del Tri en la media cancha.
Volviendo al “Chaquito”, si miramos no al futbolista, sino a la persona, a sus 21 años no deja de ser un muchacho, un huerco, como decimos aquí y, siendo soltero, con un buen ingreso y en Países Bajos, una de las naciones más liberales del mundo, tal vez la más, no sería difícil imaginar que alguien con esas características se perdiera en la fiesta y demás placeres. Tenemos hartos ejemplos entre sus colegas nacionales, y el más grande de ellos, por desgracia, es el D10s Maradona.
Pero seguro que eso no va pasar con Santi, quien está bien encaminado, parece muy centrado a pesar de su corta edad y tiene el consejo y apoyo de su padre, a quien conocemos bien, un profesional alejado del escándalo. Se debe predicar con el ejemplo, y el “Chaco” lo hizo con su hijo.
Parte muy importante es que en el Viejo Continente siga practicando la disciplina, pues el trabajo que tiene como futbolista es muy demandante. Una vez llevé a un juego de los Bravos a los dos hijos de mi hermana cuando eran muy pequeños, tendrían unos 5 y 7 años, y el mayor me preguntó que si a los jugadores les pagaban. Le dije que sí, que ese era su trabajo. “¡Yo quiero ser futbolista!”, gritó. Bueno, le agregué, no nomás es venir al partido, sino que “no deben tomar soda, ni comer hamburguesas, tacos, pizzas, tienen que hacer mucho ejercicio para mantenerse delgados y fuertes, no pueden desvelarse en fiestas para no andar cansados, entrenan aunque haga mucho frío, mucho calor o llueva. Todo eso los ayuda a ser mejores”. Después de comentarle eso, como que ya no le interesó mucho la profesión de las patadas.
Obvio que muy pocos siguen todas esas reglas al pie de la letra y posiblemente sea una de las causas de la inconsistencia del futbolista mexicano.
En cuanto a su partida, recuerdo que cuando el “Chicharito” se fue a Manchester su padre mencionó que su hijo ya lo había superado, e incluso al abuelo, pues ellos sólo jugaron aquí.
No sé si sea exagerado que Santi ya superó al “Chaco” con esta mudanza. No sé. Sólo esperemos que, con eso de que la historia es cíclica, al final del día, si se adapta rápido a la Eredivisie y empieza a meter goles, no pase como en Sudáfrica 2010, que el técnico puso de titular a un argentino naturalizado en vez de a Javier Hernández, que cada que entraba movía la red.
HECHOS EN MÉXICO
Los únicos cuatro técnicos mexicanos en la Liga MX están en lo más alto de la tabla: Vucetich, con Rayados; El Piojo, con Tigres, ambos con experiencia en Selección Nacional; Nacho Ambriz, candidato natural a tomar el Tri algún día, con Toluca, y Jimmy Lozano, (¿sucesor de Ambriz?) con una nómina mucho menor, tiene al Necaxa en el nada despreciable cuarto sitio.
Esto demuestra que los técnicos aztecas funcionan, pero se les deben dar más oportunidades, y también deberían buscar irse a otras latitudes, aunque sea a ligas de menor calidad, pero en todos lados van a aprender algo que los haga mejores y los prepare para enfrentarse a sus colegas de la élite.