El gobernador electo Américo Villarreal Anaya anunció ayer un paquete de inversiones por un monto de mil quinientos millones de pesos, diseñado por empresarios para ponerse en marcha en el arranque de su gestión, en octubre.
Además, el gobierno estatal entrante tiene su programa de gasto propio, al que hay que sumar el presupuesto federal en materia de obra pública, de tal manera que espera a Tamaulipas una lluvia de dinero que se traducirá en la modernización de la infraestructura.
Se acabaron los tiempos de las vacas flacas.
Es un magnífico augurio porque supone la terminación de la prolongada seca de gasto que caracterizó a la gestión del gobernador Cabeza de Vaca. Volverán los felices tiempos de la derrama económica.
La rudeza y patanería de Cabeza de Vaca hicieron imposible la concertación de voluntades y de esfuerzos con otros niveles de gobierno e inclusive con la iniciativa privada, condenando al Estado a una postración en gasto público.
Pero ya se vislumbra la luz al final del túnel, al estar próximo la liquidación del ciclo sexenal del gobierno panista y la entronización de Américo Villarreal Anaya, quien se propone recuperar el tiempo perdido. “Tenemos prisa”.
Agregó que “debemos romper el abismo de desconfianza en que nos colocó el gobierno actual”, dijo con franqueza política.
Pese a la insistencia de los reporteros que asistieron a la conferencia de prensa de los lunes, el gobernador electo no soltó prenda acerca de la integración de su Gabinete. “Están pendientes todavía”, respondió escuetamente cuando quisieron sonsacarle nombres.
Dio el médico Villarreal pormenores de su visita de varios días a la Ciudad de México, donde entrevistó a miembros del primer círculo de colaboradores del presidente López Obrador.
Reveló que ya tiene seleccionado al equipo que trabajará a partir del 1 de septiembre en la preparación de la ceremonia de entrega-recepción del gobierno del Estado, y que tendrá a su cargo lo concerniente a revisar los términos técnicos políticos del relevo.
Dijo que inició negociaciones con el titular del Instituto Nacional para el Bienestar, Insabe, Juan Ferrer, a efecto de incorporar a Tamaulipas a los programas de salud, que Cabeza de Vaca rechazó en su oportunidad.
Tiene Américo particular interés en modernizar los hospitales regional de alta especialidad de Ciudad Victoria y el Civil de Nuevo Laredo.
Respecto de la elección interna de consejeros de Morena, opinó que se trató de un proceso tranquilo en los nueve distritos, con la participación de más de 700 mil personas, lo que es un indicativo de la madurez que imperar en el partido.
Agregó que el miércoles se darán a conocer de manera oficial los resultados de este ejercicio, así como los nombres de los consejeros electos.
Durante la conferencia, Américo estuvo acompañado por la abogada Tania Contreras López, a quien presentaron como su asesora jurídica. La dama fue consejera presidenta del Ietam.
Por su parte, el presidente municipal de Ciudad Victoria, Eduardo Gattas Báez, anunció la confirmación de un gasto superior a los mil quinientos millones de pesos presupuestado por la Federación en el año 2023, para la segunda etapa del acueducto desde la presa Vicente Guerrero.
Con esta obra, la capital de Tamaulipas tendrá garantizado el abasto de agua hasta más allá del año 2050, según las apreciaciones de los expertos. La primera línea del tendido subterráneo se hizo durante el gobierno de Américo Villarreal Guerra.
Gattas Báez también dio la buena nueva de la construcción el próximo año, de un paso vehicular a desnivel sobre la carretera a Monterrey.
Por el rumbo de Nuevo Laredo, la presidenta municipal Carmen Lilia Canturosas Villarreal emprendió el programa de la revisión de 16,501 luminarias, para reponer las que sean necesarias y garantizar la modernización del alumbrado público.
Se están reemplazando las lámparas de vapor de sodio por otras LED, lo que implica un ahorro del 46 por ciento en el consumo de electricidad y se dejaron de emitir a la atmósfera 709 toneladas de dióxido de carbono cada año.
Carmen Lilia dio instrucciones de que se atiendan preferentemente plazas y parques públicos, así como colonias con mayor incidencia delincuencial.
En tanto que en Matamoros, “La Borrega” Mario Alberto López Hernández autorizó la condonación del ciento por ciento de los recargos a los contribuyentes morosos del impuesto predial, como un incentivo para que paguen el rezago y se pongan al corriente.
Funcionarios de finanzas se declararon satisfechos por la respuesta de los matamorenses, pues se consiguió el doble objetivo, de ayudar a las finanzas familiares y al mismo tiempo aumentar la recaudación de dinero.
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