Hoy es un día para dejar de lado todas las diferencias, incluso la presidenta Claudia Sheinbaum hizo un llamado a los partidos opositores a ponerle pausa a los conflictos en las vísperas de esta Navidad, pues evidentemente habrá tiempo para discutir más adelante todos los pendientes, claro, un diálogo civilizado sería lo idóneo.
Esto aplica sin duda para todos los círculos, desde la política hasta lo familiar y, por supuesto, con las amistades y, aunque no debería ser necesaria alguna fecha en especial, es un buen momento para la tregua y la reflexión, pues hasta los países en guerra tienen de vez en cuando un cese al fuego.
Con frecuencia se habla de esos clásicos conflictos familiares “por los terrenos” y otros motivos que surgen en las reuniones navideñas, usualmente con el calor de las copas y los comentarios completamente innecesarios o cargados de jiribilla que llevan a abordar temas delicados o revivir viejas rencillas durante el peor momento posible, que es una cena en la que debe abundar la paz.
Las noticias recientes están cargadas de conflictos; desde las amenazas del próximo presidente Trump hasta los conflictos bélicos en curso en todo el mundo y, claro, la política que siempre es motivo de división en cualquier rincón del país y del mundo, por eso es crucial esa pausa, la bandera blanca, pues tal vez podamos cambiar el rumbo para el 2025 por el bien común, entendiendo que el sol puede salir para todos.
Desde la redacción de El Mañana, queremos desearle una Feliz Nochebuena en compañía de sus seres queridos, disfrutar con moderación y recomendarle que unos 15 minutos antes y 15 minutos después de medianoche de hoy, se mantenga bajo techo y en la medida de lo posible un poco lejos de puertas y ventanas, por aquello de la muy arraigada y estúpida costumbre de realizar detonaciones y, aunque son las vísperas de Año Nuevo las que registran más incidentes de esta naturaleza, la Navidad suele festejarse también así.