PASADIZO SECRETO

LISD y UISD ¿sin rumbo educativo?

Escrito en OPINIÓN el

En la vecina ciudad de Laredo, Texas, y por lo que se ha visto en estas últimas décadas, ese proyecto trazado para darle esa dirección eficaz a la educación de su niñez se ha desacelerado, mostrando acaso y por lo mismo un LISD y UISD ¿sin rumbo educativo?

Plan que desde los años sesenta estuvo bien enfocado por esos grandes profesores y promotores de la educación texana, laredense, pues visto es que desde que se preocuparon en brindar una mejor educación académica, numerosos edificios comenzaron a ser construidos para ese fin.

Complementándose dicho propósito con excelsos profesores y profesoras con un historial educativo y de preparación acorde al compromiso, cada uno capaz de enfrentar, coadyuvar y satisfacer la demanda educativa de esos tiempos.

En consecuencia, la respuesta de la comunidad laredense era inmediata, pues al tener, disfrutar de un modelo creado para ser aprovechado al máximo e igualitario, generaba año tras año profesionistas, técnicos y mano de obra calificada para satisfacer ese Laredo pujante, brillante que se estaba construyendo.

Hoy aun retumban esos nombres de grandes empresarios, doctores, ingenieros, arquitectos, técnicos o el prestigio de ese contratista, de esa mano de obra calificada, emanada de esas instituciones educativas que efectivamente, procuraban, se preocupaban por lanzar a la comunidad eficientes egresados.

Por lo mismo y como un orgullo, de esos muchos ciudadanos han sido plasmados sus nombres en calles, avenidas, parques, colonias, centros escolares, entre muchos otros sitios de interés, logrando con esto, esa certeza de que la buena educación académica forma parte indiscutible de toda comunidad para su desarrollo, herencia y prestigio.

Sin embargo y a partir de los años noventa, se sucedieron diversos fenómenos en donde la proliferación de muchos más centros educativos contrastaba y en demasía ante el número de profesionales egresados, pues de tener ese semillero de graduados que llegaban a la universidad, esa disminución ha marcado hasta estos tiempos actuales ese espectro negativo educativo.

Preocupante podría ser, que ante ese fortalecido programa educativo laredense, que cuenta con más y mejores edificios escolares, con mejores recursos, con infinidad de apoyos públicos y privados, no obtenga los resultados que desea todo padre o madre de familia para con sus hijos, hijas.

Si, esos niños y niñas que desde esa edad pequeña se les confía a los distritos escolares para su educación y formación académica, proyecto de vida que por lo visto no se está concluyendo en gran escala, satisfactoriamente, por lo que bueno sería saber en qué se está fallando en estos aspectos.

¿Acaso es el sistema educativo que no es el acorde o no cumple cabalmente con lo que la niñez o ya como jóvenes requiere?, ¿O quizás sea que el problema radique en que los maestros o maestras no están cumpliendo con su cuota de preparación educativa para llegar a estar al frente de un grupo de alumnos?

Sobre esto, de ninguna manera se debe de considerar ni la situación económica de los padres o madres de familia, ni mucho menos sectores de extrema pobreza o con marcados índices delictivos como el original problema, sino más bien empezar por medir el grado de capacidad académica de los maestros para inducir a sus alumnos y alumnas a ser esos ciudadanos de bien en todos los aspectos seria lo correcto.

Entonces tanto el LISD (Laredo Independent School District) así como el UISD (United Independent School District) tienen una gran tarea para entender por qué sus alumnos no están llegando en el mismo porcentaje de graduados a niveles de educación profesional y por lo mismo el igual cuestionarse:

¿Acaso es por falta de aplicarle recursos directamente a los estudiantes a través de becas económicas para motivarlos a seguir estudiando?, ¿Acaso es porque no existen suficientes programas para inducir a los jóvenes a áreas laborales de una forma dual al tiempo que estudian?, ¿Acaso es porque se les promueven en demasía carreras de asistentes técnicos que por lo mismo truncan sus aspiraciones hacia carreras profesionales?

Según la Encuesta sobre la Comunidad Estadounidense por sus siglas en inglés (ACS) detallada en la página oficial de la Oficina del Censo de los Estados Unidos de Norteamérica en el apartado de la comunidad de Laredo, estima que el 70.5 % logran obtener un diploma al graduarse de la escuela secundaria o superior.

Sin embargo y bajo la misma fuente informativa, despliega por igual que tan solo el 21.5 % están logrando un título universitario entre maestrías, doctorados sobre el rango de los 25 años de edad.

Sobre esto, debe entenderse que la profesionalización de los estudiantes a niveles académicos universitarios no es otra cosa más que el resultado de un excelente plan escolar, plan que debe respetarse, actualizarse cada inicio de ciclo escolar.

Pues su conclusión como profesional dará certeza de que efectivamente las cosas se están haciendo correctamente, brindando a su propia comunidad ese resultado en donde el incremento del nivel educativo permeara indiscutiblemente tanto en el progreso y economía, como en la vida misma y sus costumbres de la propia sociedad laredense.