Las dos reformas constitucionales de la “precisa” Claudia Sheinbaum soltadas este 5 de febrero precisamente en el día histórico de nuestra Carga Magna, ese documento tan violado y que reza; “Sufragio efectivo, no reelección”, ya son un hecho en ambas cámaras legislativas nacionales.
En serio que dice adiós a los vivales eternizados en el poder, bandidos apostados en las cajas de las galletas, tracañanes de sangre o queriditas y queriditos impuestos en los huesos de manotear la lana, mandar en el terruño y hacer cada trastada al pueblo mexicano.
Ya quedó firme, ya fueron aprobadas, pero si bien entran en vigor para hacerse efectivas hasta en las votaciones del 2030 y las que les sigan a ese año (la presidencial, así como la cambiadera en las cámaras alta y baja), el reto es para que nadie desde ahora continúe con esas porquerías de eternizarse ellos saltando de cargo en cargo o a sus familias o a través de sus inches compinches.
ERA PARA AHORA
Es un hecho que la presidenta y los Morenos, desde ahora la han adoptado, para los guindos entra en vigor ya, en estas votaciones intermedias del 2027, es decir, para renovar el H. Congreso de la Uñón y las elecciones locales que se atraviesen, ya sean para alcachofas, así como para diputeibols rancheros y curuleras del terruño.
“Se vería muy mal y el pueblo los reprobaría”, dijo CSP, lanzando flamígera sentencia a los Gabinos y a las Gaviotas que se atrevan a pasarse por el arco del triunfo, el espíritu de ese par de reformas constitucionales (no a la reelección inmediata y al nepotismo), aun antes del 2030.
“Y aquel que lo haga (se apunte) en 2027, pues se va a ver muy mal”, condenó la Doctora.
“Si alguien quiere postular en 2027 a un familiar, no creo que le vaya muy bien, no creo que el pueblo vaya a aprobar esa condición”, machacó la Ejecutiva Nacional, con sensación de establecerlo como ley electoral -no registrada-, para este vacío que al respecto habrá dentro de dos años, pues ella quería que quedara amarrado para el 2027 y no para el 2030, como es que se resolvió.
NI QUELITES, NI MOZOS DE ESPADAS
En todo caso ya quedaría asentado en la Constitución, el adiós al carnalismo, esposismo, las “juanitas y juanitos”, el mayatismo, el caquinismo, cuñadismo, mirreyismo, suegrismo y cuñadismo.
Ni la sangre, ni la parentela, no al bueno para nada del hermano inútil (como cierto porno senador, que luego pasó a ser inútil diputero, impuesto también de puras barbas y ahora sigue tragando de a grapa en el congreso cuerudo).
Tampoco a la amiguita, ni al chulo que te trajiste de otro estado para cuerpearte -en la cama-, ya no más de esos sucios socios, los charolastras, los bebés que estos degenerados presentan en público y en la sociedad, “como su sobrino (a) recién llegado de Houston”, pero que no son otra cosa que el amiguito querido, la chica con la que hacen el ridículo y que eso les hace feliz.
Esos ya no cabrán más dentro de los “cuadros chicos” de esos bandidos que quieren seguir Evenflando o a los que ellos desean imponer para seguir papeándose de lo lindo.
Nada de poner al viejo decrépito del suegro o a la vieja bofa de la mamá de su fiera.
No se permitirá parentesco de sangre (plaquetas podridas de origen, glóbulos negros, porque estos, blancos no tienen ni los de los ojos, nada); como tampoco parentela política.
Nadie podrá postularse a un cargo de elección popular si en los últimos tres años ha tenido un vínculo de matrimonio, cochino amasiato, llevarse de a cuartos o de piquete de occipucio, concubinato, unión de hecho o parentesco con quien ocupe ese puesto.
NADA LES EMBONA
Y parece increíble, como es que hay gente del “PRIANMC” que critica esta reforma constitucional enviada por la Presidenta Sheinbaum, peor aún, que argumenten que es una jugarreta para brincar de lo federal a lo local y viceversa, y así irsela llevando.
¿Cómo en Tamaulipas los Chompa de Res, o sus sucios socios “Los Trucos” Verástegui Ostos y su fundita Jerry Peña Flores, que van de pluri en pluri, entre cobrar en CDMX y en Ciudad Victoria?
¿O los Moreira, los Beltrones y toda una piara de prístinos y panuchos?
Claudia Sheinbaum fue clara, al asegurar que el pueblo no aprobará que un partido o coalición postule como candidato al familiar de un gobernante o de un representante popular, ya en las elecciones de 2027, sin siquiera esperar a las del 2030.
Y recomendó a su partido MORENA que no incluya en el 27 a familiares de actuales representantes populares; incluso, remarcó que los estatutos de ese instituto político así lo establecen.
“Sufragio efectivo, no reelección” fue adoptada por Francisco I. Madero en su campaña del 1910, para ganarle a Porfirio Díaz, quien estuvo sentado durante 35 años seguidos en el poder.
Y quedó fijada en la Constitución de México en 1917, pero Enrique Peña Nieto y sus socios los neoliberales, vinieron dar al traste con eso en el 2014, cuando se permitió la reelección de alcaldes y legisladores, una verdadera jalada y completo atentado a la soberanía.
Vamos a ver qué sinvergüenzas en el país, dentro de 2 años (2027) se reeligen porque la ley todavía se los permitirá; o quienes imponen a uno de los suyos, porque será hasta el 2030, cuando queden sin efecto tales marranadas.
Feliz domingo para todos, que nadie los engañe, ya no más triquiñuelas de esas, se vale votar en contra si sigue la hermana y fraternal artimaña de poner a los mismos en carácter de “forever and ever” (hasta que se acabe el rancho... y el tesoro).